El Perdón es el regalo que Dios hizo a Su Hijo cuando supo que se había dormido, porque sabía que en sueños, desconectado de su Fuente, el miedo sería su única compañía. Su Perdón, y ningún otro acaba con tus conflictos. No sirve hacerse el positivo, ignorarlos, cambiarles de nombre, tienen que verse exactamente como son y aplicarles el Perdón.
Porqué habrá una voluntad subconsciente tan tozuda que no quiere verlo?